Un laboratorio es un espacio para explorar, para cometer errores y aprender de ellos y también de los logros. Un espacio abierto a la reflexión.
En este camino que transita la persona que cuenta historias de viva voz implica un trabajo de búsqueda personal que, si bien es individual, es necesario compartir con otras personas a la hora de explorar.
El formato laboratorio permite elegir un tema en concreto y explorarlo desde el aquí y el ahora de la persona que asiste a este encuentro de búsqueda.
Como en todos los oficios el paso del tiempo nos va dando experiencia a la vez que nos plantea nuevas preguntas sobre tal o cual tema.
Este formato permite a los interesados participar más de una vez en un mismo laboratorio ya que si bien el tema se trabaja en grupos, la búsqueda está abierta a la búsqueda individual.
El laboratorio no es un lugar para encontrar respuestas certeras sino para formular nuevas preguntas que sean el motor de nuestro crecimiento en la tarea.